Andrés López y La Orquesta Filarmónica de Bogotá, un acercamiento a la música clásica

Andrés López - Orquesta Filarmónica de Bogotá

La Orquesta Filarmónica de Bogotá y Andrés López, una particular combinación para llevar la música clásica a niños y adultos, maestría, - la dirección del Maestro Eduardo Carrizosa,  el aporte de la orquesta, humor, gracia, actuación y didáctica, por parte comediante colombiano.

Concierto en Compensar

En el mismo escenario del show de fuentes de agua, luz y música de la Caja de Compesación, Compensar, en una tarde soleada y casi cayendo la noche, con un público diverso, probablemente algunos que por primera vez escuchaban en vivo una orquesta de este tipo, en muchos casos desconocen la solemnidad que enmarca la música sinfónica, sin embargo Andrés López, rompe ese cliché dado a la música clásica con su estilo, haciendo que el público esté concentrado y expectante. La presentación recuerda mucho un programa de Tve - El Orquestazo

El concierto es enmarcado por el  comediante Andréz López, en la actividad cotidiana de los estudiantes de colegio, - la idea original de este concierto - levantarse con los cinco minutos más de sueño, hasta que caída la noche, llega el ansiado descanso.

Los temas interpretados por la orquesta, incluyeron bandas sonoras: la de película de ficción, Star Wars, la película 2001 Odisea del Espacio, que utilizó la obra,  Así habló Zarathustra, op. 30, un poema sinfónico compuesto por Richard Strauss, autor que se inspiró en la obra homónima de Friedrich Nietzsche, después López llevó al público a la infancia, con la musica de inicio de la comedia, El Chavo del Ocho de Chespirito, música compuesta por Jean-Jacques Perrey, titulada “The Elephant Never Forgets”, basado en un tema de L.V. Beethoven.  De manera jocosa, López presentó las estaciones del clima, cuatro momentos a los que el compositor italiano Antonio Vivaldi, intentó describir con sus notas para los violines, aunque por estas latitudes solo sea posible una un invierno lluvioso y un verano largo.

Recordamos al Llanero solitario, con un fragmento de la obertura Guillermo Tell de Gioachino Rossini, algunos se enteraron que este era el autor, otros disfrutaron de la interpretación, luego apareció una referencia al rio Tunjuelito cuando la orquesta interpretó el Danubio Azul de Strauss. La genialidad de otros compositores clásicos estuvo presente con fragmentos de Chopin y Antonín Leopold Dvořák

Algo de la música latinoamérica, Cuba, y por lo menos una obra colombiana, La Gata Golosa, del compositor colombiano Fulgencio García, la presentación acompasada por un baile del comediante y una bogotana del público.

 Ya en el cierre, como en muchos "shows", el tema de la paz estuvo presente con los vínculos entre la Francia napoleónica y la Rusia de los zares, y por ahí mismo nuestra Colombia

El público  disfrutó de las notas de la orquesta y la chispa del colombianísimo Andrés López. Una antesala a todo lo que hay por ver en Bogotá en esta Semana Santa.